Comienzo por decir que lo que conocimos de Bolivia, superó toda posible expectativa.
Sus hermosísimos paisajes, su cálida gente y su privilegiada temperatura, sin duda valen la pena.
No podríamos sentirnos más agradecidos con Late Bolivia. Disponíamos de 7 días y teníamos muy claro lo que deseábamos conocer. Eliana, con infinita paciencia, nos diseñó el itinerario perfecto ajustado a nuestro presupuesto.
Optamos por hospedarnos en el Hostal Naira en La Paz; Hotel Luna Salada en Uyuni y Hotel Tayka El Desierto en el Desierto de Siloli. Quedamos sumamente complacidos con nuestras elecciones.
Contratamos los traslados de aeropuerto/hotel; el tour de medio día en La Paz (que después reestructuramos a nuestro antojo sin que ello representara un problema); la lucha libre de “Las Cholitas”; tour a Uyuni y el desierto de dos noches; y el paseo al Titicaca e Isla del Sol. Todo fluyó a pedir de boca.
Gloria, nuestra insuperable guía, sencillamente una dulzura de mujer que, en el tanto respetáramos los tiempos, procuró complacernos en todo momento. Como gozamos con ella!
Edwin, nuestro conductor en Uyuni y la zona del desierto (llegamos prácticamente hasta la frontera de Hito Cajón), nos dejó sin palabras. Un conductor magistral en unas carreteras prácticamente inexistentes. Un experto en todos los trucos fotográficos en el espejo de sal maravilloso que nos recibió en El Salar.
Don Celso, nuestro conductor en La Paz, un señor con una linda disposición de brindarnos siempre la mejor atención posible.
En resumen, fue un viaje inolvidable y maravilloso. Gracias a la familia de Late Bolivia por un viaje que jamás olvidaremos.