Muy buena sala, gran dificultad. Hicimos Montezuma y aunque llevamos muchas salas a nuestras espaldas no fue demasiado sencilla.
La ambientación es espectacular.
Además, Roger, el dueño, se portó genial con nosotros.
En resumen nos ha gustado tanto que vamos a repetir antes de irnos de Roma con otra de las salas que tienen.
Muy recomendable!!