El hotel es lindo, limipio, con una buena arquitectura que te permite disfrutar del bello jardin y del mar. Yo no surfeo y el hotel es perfecto para disfrutar de la sauna, jacuzzi y piscina caliente. Aproveché mi tiempo y me hice masajes a un precio justo. Pedí una ensalda de quinua deliciosa. Leí mucho en el balcón. Por el tema del COVID, llevan el desayuno a la habitación y es enorme. No escatiman en atender al cliente en ningún punto. El hotel es buenísimo y voy a regresar mil veces. Gracias!
Chicama es sin duda un lugar especial y el hotel hace que la experiencia sea única. Las facilidades, restaurante, bar, habitaciones amplias, vista a las olas, piscina y jacuzzi, gimnasio, entre otros, junto con una atención de primera con altos protocolos de salud son una combinación extraordinaria que se suman a una ola mágica y eterna, que además cuenta con el apoyo de lanchas para regresar al point y así poder sacar el máximo provecho a las sesiones de surfing. No hay duda que Chicama Boutique Hotel es la mejor opción.
Gracias Hotel Chicama por un viaje increíble para una familia de 5. Surf: no podría ser más fácil con el descenso y la recogida del barco, puede obtener la mayor cantidad de olas posible. Nuestra familia tiene 3 surfistas avanzados, uno intermedio y uno principiante y todos estuvimos felices. El personal del hotel es increíble, las vistas desde nuestra terraza delantera y la pasarela trasera estaban fuera de este mundo (el desierto es un poco loco y se va para siempre). Fuera del surf épico, no hay mucho más que hacer aquí: paseos por la playa, paseos en bicicleta por la playa y muchas cartas en la terraza de la piscina. Perfecto para nuestra familia que busca estar completamente comprometida con la relajación y estar juntos sin distracciones. Recomendamos encarecidamente los batidos posteriores al surf y los 2 por 1 happy hour después de un día en las olas. El personal es excelente con cualquier solicitud. . . . pedimos un pastel de cumpleaños, necesitamos ayuda con los frenos / ortodoncia rotos de nuestro hijo adolescente, organizamos transferencias de Trujillo a Chicama, organizamos sesiones especiales de surf por la mañana para nuestro surfista avanzado en otros lugares, tomamos excelentes fotografías de surf, etc. Gran atención al detalle, limpieza y ambiente relajado y feliz.
Nos alojamos con familia y amigos.
El hotel es acogedor y busca q t desconectes.
Cuenta con una piscina chica temperada, la cual usamos pues fuimos durante temporada de bastante viento.
Cuenta con sauna, jacuzzi, gimnasio, mesa de billar, pin pon gratis.
Además d servicio de masajes y clases de surf.
Se puede aprovechar el pasear x el malecón, el cual está renovado.
Es un hotel boutique con todas las comodidades excepto TV en los cuartos pero tiene de todo: piscina temperada, spa, salón de juegos para los niños, bar, la comida es muy buena, desayuno buffet, las personas que atienden son súper serviciales y amables. La playa está frente del Hotel lo que da una vista espectacular si pides habitación en el segundo piso. Dan clases de surf y el malecón para salir a caminar esta súper bien cuidado y lindo