Nos alojamos en el Hotel Marqueses por 4 noches. Nuestra primera noche en Cusco nos hospedamos en el hotel Cooper Boutique, que era encantador. Y solo $ 90. Fuimos a Ollyantambo por algunas noches y regresamos a Cusco por algunas noches para aclimatarnos antes de comenzar el Camino Inca.
Tuvimos que pagar en efectivo $ 140 por una habitación triple, mientras nos registramos y ojalá hubiéramos pagado noche a noche. Nos llevaron a un calabozo del primer piso de una habitación. Nuestra única ventana tenía rejas y se abría al vestíbulo, y el altavoz del hotel del vestíbulo estaba justo afuera de nuestra habitación. Nuestra habitación estaba muy fría y nos dieron un pequeño calentador para una habitación grande y mohosa con techos altos. La única manera de mantenerse caliente era acampar directamente enfrente del calentador. Agregue que además de que hay moho en la habitación (llegaré a eso). Dos de nosotros tuvimos infecciones sinusales de la habitación.
Pensé que la única manera de calentarme era tomar una ducha caliente. Sin embargo, no había agua caliente para ninguno de nosotros. Dos de mis compañeros de cuarto tenían una ducha tibia y yo tenía una ducha fría y helada.
En nuestra tercera noche allí, acabábamos de regresar de una larga excursión de un día y estábamos tratando de empacar para el Camino Inca antes de reunirnos con las otras 6 personas de nuestro grupo. A las 7 pm, la persona en la habitación de arriba debe haber estado tomando una ducha porque el techo comenzó a gotear no en uno sino en dos lugares (se podían ver las manchas en el techo donde esto debe haber ocurrido antes). Nuestras cosas para empacar para el camino se extendieron por toda la habitación. Salí para informarle al personal de la recepción acerca de la filtración (gracias a los profesores de español de la escuela secundaria). Necesitábamos empacar todo y mudarnos (nos preguntaron qué tan rápido podíamos salir de la habitación). Nos trasladaron a una habitación doble en la planta superior que tenía las luces más tenues que jamás hayas visto y apenas podíamos guardar nuestras pertenencias en la habitación y mucho menos ver para tratar de empacar.
Tuvimos que luchar para obtener la diferencia de costo entre dos habitaciones.
Salimos para la cena y regresamos a las 10 pm y nos pidieron que nos mudáramos de nuevo porque ahora tenían una habitación triple para nosotros. Tuvimos un despertador a las 5 am y aún no habíamos terminado de empacar.
Luego entro al baño a bañarme.
Tengo 6'2, he tenido que agacharme antes de ducharme, pero NUNCA en mi vida nunca he podido físicamente pararme en una ducha antes. Tuve que agacharme para meterme en la ducha y no golpearme la cabeza. Otra vez. No hay agua caliente.
Regresamos cansados y sucios del camino inca, solo queriendo una ducha caliente. Fue un milagro que el agua estuviera caliente durante DOS MINUTOS antes de volver a enfriarse.
En esta sala podíamos escuchar palabra por palabra cada cosa que decían las personas en las habitaciones. Era como si estuvieran en la habitación con nosotros.
En esta sala, el techo tenía una grieta y moho (ver foto) Y TENEMOS BLOQUEADO EN NUESTRA habitación. Como si hubiera habido un incendio, no hubiéramos podido salir rápidamente, tuvimos que abrir una pequeña sección de la pesada puerta de madera y abrir la habitación desde el exterior. (Ver foto). También demoró 5 minutos en jugar con la cerradura para cerrar la puerta. Acabábamos de descubrir cómo cerrar la puerta con llave cuando pasamos junto a nuestro amigo por el pasillo luchando por cerrar la puerta.
Otro amigo pagó $ 120 por su habitación en efectivo a pesar de recibir una cotización de $ 90 de la reserva. com y el personal del frente habían escrito a mano en su recibo que solo pagaba $ 90. Le dieron un mal momento por deber dinero.
Teníamos por escrito que tendríamos transporte gratuito al aeropuerto el último día y se nos pedía que pagáramos 20 soles (pagaron un taxi después de que les mostráramos el correo electrónico)
El wifi es horrible. No como en lento. Como en ti lo pierdes cada minuto más o menos.
La ÚNICA salvación de este hotel es que
Los porteros, especialmente un hombre llamado Edwin, fueron increíblemente útiles. Y tenían café y té de coca y agua para ti todo el día.
Mi consejo, no te quedes aquí. Quería que este hotel me gustara como un encantador edificio de 300 años. Pero hay lugares mejores y más baratos para quedarse en Cusco. No te quedes aquí.
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