El lugar lindo ,el alojamiento increíble y la comida espectacular, el personal excelente trato sobretodo la Srta Luz Belen súper amable Súper relajante y tranquilo , excelente para un descanso reparador
No hay foto, conjunto de ellas, filmación que haga justicia a tante belleza. Para donde uno mire tendrá algo imponente y perfecto. El hotel es increíble. Más que una casita es casi una casa lujosa que ofrece un confort enorme. Pena no haber extendido la visita por lo menos un día más para disfrutar del lugar un poco más. El cuarto muy amplio0, una cama King, el vestidor, un baño enorme, todo de calidad, el spa, hacen que uno tenga ganas de más ya que al ser casas independientes, provee de una gran intimidad y calidez. El restaurante ofrece comida más que aceptable y todo el servicio es Calidad Belmond. El paseo al valle todo una experiencia; desde llegar a casi 5000mts de altura hasta las asombrosas vistas del cañón y el valle. Y la frutilla del postre: la Cruz del Condor y el vuelo majestuoso de esas aves únicas. Experiencias únicas.…
Contratamos 1 noche en este maravilloso hotel y tengo que decir que desde las instalaciones hasta el personal altamente calificado para atención al cliente nos brindaron una experiencia de lujo. El complejo es amplio, no demasiado grande como para que se pueda recorrer a pie, pero tampoco tan pequeño en caso te encuentres cansado, por esta razón existe un carrito de golf que te puede trasladar. Cada casita cuenta con una infraestructura con la que han sabido equilibrar un estilo rústico y moderno al mismo tiempo, son amplias, el baño tiene dos ambientes y definitivamente cuenta con todas las comodidades, también tiene una pocita de agua caliente que se te puede nivelar la temperatura llamando a las personas encargadas. El restaurante está muy bien, lo único es que podría tener una carta más variada, más alla que los platos estén muy buenos. Servicio excelente A1.…
Todos son súper atentos y serviciales. La habitación es espectacular, con una vista preciosa. Definitivamente para volver. Los postres son lo mejor! Mi amiga eligió el hotel para celebrar su cumpleaños y definitivamente la hicieron sentir en casa.
La atención desde el momento en que llegamos es de primera. Belén en recepción súper amable, Jesús, supervisor de comidas y bebidas recontra amable y servicial siempre atento en todo sentido. Julio César de restaurante, los chicos de houskeeping nos llevaron unas bolsas calientes de ovejitas para calentar la cama en un día de lluvia. Súper engreídos hemos estado! Las casitas son acojedoras, tienen chimenea y piscina temperada propia. La vista es espectacular, hay 3 alpacas y una llama cariñosas y graciosas. Elmer y Pascual los encargados de los jardines y de los animales muy amables. El chef tiene unos platos deliciosos y si no están en la carta te los prepara. Servicio de primera. Above and beyond. Felicitaciones!
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