Fui con mi hijo de 15 años. Es un hotel que sale de lo normal!!! Cada entrada a la habitación tiene una cortina de plástico colocadas en semicírculo reflejadas por diferentes luces de colores, esto es muy llamativo! La habitación amplia, luminosa, limpia y las camas y almohadas muy cómodas. La habitación con balcón, muy linda vista. El baño pequeño pero muy bien, en cuanto a la ducha era espaciosa, la lluvia con buen caudal de agua, el único inconveniente es que la cortina que cubre la ducha, solo la cubre en la parte de adelante, por lo que si te gusta bañarte con más privacidad este no resultaría tan cómodo. Diferentes espacios del hotel con toques decorativos, un espacio común para usar la computadora, servirte café, te, galletitas y agua a disposición del huésped. Otro punto a destacar es que llegamos 3 hs antes del check in para dejar las maletas (había enviado mail preguntando si lo podía hacer), El personal de recepción muy atento y predispuesto a dar información solicitada. El desayuno buffet estaba incluido en la tarifa y tenía variedad, el camarero Lalo muy amigable y servicial. Hemos pasado 3 días estupendos!! Gracias!!!!…
Si quieres moverte por la zona del gótico este es un buen alojamiento. También la comunicación con otras zonas es óptima. El Hotel es tranquilo y las personas de recepción muy atentas. Tiene también un pequeño hall con cafetera, te, agua en la planta de las habitaciones. Como en todos sus hoteles la decoración está cuidada.
El trato excelente,muy atentas las chicas de recepción, la habitación muy acogedora y la cama inmejorable súper cómoda,el único pero la ducha que no tenía extensible, sin duda en nuestra próxima estancia en Barcelona repetiremos.
Una estancia muy agradable, gran amabilidad del personal, zonas comunes acogedoras con autoservicio de agua, café o te, incluido en el precio de la habitación. Edificio de finales del XIIX acondicionado y decorado con un toque "chic", La situación es excelente, en un barrio como El Born, donde puedes encontrar muchos locales dedicados a restauración de todo tipo. Un barrio con vida propia.
Mi pareja y yo llevamos años alojándonos en este hotel. La ubicación, las instalaciones, el confort de las habitaciones, la decoración.... Pero sin duda , lo mejor es una persona que trabaja allí, su nombre es Ana Bru, profesional, cercana, amable, detallista, simpatia a raudales... Gracias por tu trato SIEMPRE.
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