Llegue para quedarme cuatro dias. Por la situación de las carreteras alargue mi estadía. Una extraordinaria oportunidad para disfrutar la gran calidad de servicios que brindan. Surfear en este lugar es magico, pero que un zodiak te deje en el punto preciso es increible. Gian Carlo, el capitan del mar, lleva a cada surfista al point. La comida, de Silvia, y sus recomendaciones es digna de los mejores lugares de clase mundial. El un ais en emergencia no es posible tener mejor experiencia. El Gerente Miguel Vega y Ralph, gerente de turno, nos hace sentir como en casa y cada detalle es cuidado en los mas mínimo. Los masajes y el yakuzy son capaces de hacernos olvidar cualquier emergencia.
Nos gusto la atención y amabilidad con que fuimos atendidos, las instalaciones super cómodas y necesarias para pasar momentos en familia con relax y actividades, tuvieron la gentileza de brindarnos una hora de yoga con Simone que mis hijas disfrutaron mucho. La comida de buen sabor y calidad; excelente decisión y relación del costo con los beneficios recibidos.
Precioso hotel con perfecta vista al mar, para relajarse en pareja o en familia. La comida es muy buena, ceviche o causa, y picarones de postre... Desayuno buffet bueno. Atentos al happy hour de tragos en la tarde... sugiero el jacuzzi frente al mar con vino, champagne o lo que prefieran para esperar el sunset... El primer hotel al que fui dónde no hay TVs en la habitación y no se necesitan :)
Todos los trabajadores son muy amables y el hotel es de primera. Cuando llegué me sorprendió que no tengan TV en los cuartos, pero me explicaron que eso es adrede, y luego lo entendí, porque si uno no está en el mar, el hotel tiene muchas diversiones que hacen que casi no estés en la habitación. Recomiendo tomar las clases de surf, el mar es perfecto para aprender sin correr peligro y los peores son expertos y buena onda.
Llegar a Chicama y ser recibidos por Cristina y su incomparable amabilidad hizo el inicio de una estadia genial. En el bar Joyce nos hizo un Pisco Sour (con pisco 4 Gallos) digno del mejor lugar gourmet del Peru. Gian Carlo nos llevó en bote a surfear y Francisco siempre nos espera con tohallas y amable como todos. Que puedo decir.... ya quiero regresar y aun no me voy.... es que la comida es deliciosa....
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