Hospedaje La Anita
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Información
Todo el mundo necesita un sitio donde reposar cuando está cansado. Para aquellos que visiten Lima, Hospedaje La Anita es una magnífica elección para descansar. Conocido por su proximidad a fantásticos restaurantes y atracciones, Hospedaje La Anita te ayuda a disfrutar de lo mejor de Lima.
Las habitaciones incluyen frigorífico, cocinita y zona de asientos, y es posible permanecer conectado, ya que hay wifi gratuito disponible, para que disfrutes de tu descanso con comodidad.
Hospedaje La Anita ofrece recepción abierta 24 horas, conserje y espacio para guardar el equipaje. Los huéspedes que lleguen en coche tienen acceso a parking gratis.
Los puntos de referencia de los alrededores, como El Parque del Amor (2,7 km) y Circuito Mágico Del Agua (2,8 km) hacen de Hospedaje La Anita un magnífico sitio donde alojarse durante un viaje a Lima.
Si te gustan los restaurantes de marisco, Hospedaje La Anita se encuentra cerca de La Rosa Nautica Restaurante, Astrid & Gastón y Maido.
Si tienes tiempo, San Isidro es una atracción conocida a la que puedes llegar andando.
Hospedaje La Anita hará inolvidable tu visita a Lima.
Ubicación
Opiniones
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Zona molto tranquilla e residenziale.
La punta di diamante della struttura è la gentilezza e la disponibilità del proprietario che cerca di aiutarti come può, a noi ha permesso di lasciare i bagagli più grandi a casa sua visto che avevamo il soggiorno in Amazzonia e dopo saremmo tornati nella sua abitazione per uno scalo di una notte. Niente acqua calda nella doccia ma a quanto ho constatato nel viaggio è una comodità poco presente in tutte le strutture del Perù, altra mancanza i riscaldamenti che soprattutto dopo la doccia e durante la notte fanno sentire la loro assenza.
Para empezar, el propietario, Álvaro, fue increíblemente útil de antemano con todas nuestras conversaciones en WhatsApp. Él fue capaz de resolver cualquier problema e inquietud que tuvimos, incluyendo encontrar un cajero automático cercano y también reservar un taxi para nosotros que nos recogió en el aeropuerto. Nos costó más que si reserváramos uno en el lugar (oa través de Uber), pero en nuestro primer día en Sudamérica nos complació pagar los ~ 20 soles adicionales para su tranquilidad.
Alvaro nos mostró nuestra habitación e incluso nos ayudó a cargar nuestro pesado equipaje. Incluso nos aconsejó sobre buenos lugares para comer en Lima y cuáles son algunos de los buenos platos para probar. Los anotamos e incluso usamos esa lista varios días después cuando aún estábamos en Perú. El restaurante que recomendó fue excelente y también nos ayudó a comunicarnos con los conductores de Uber.
Además de eso, fue tan útil como para preparar las cosas en la cocina para nosotros, ya que íbamos a salir a las 3 am para atrapar un 3. 45 am bus a paracas. Nos despertó especialmente y nos ayudó a preparar el desayuno. El sencillo desayuno era tan delicioso con mantequilla, mermelada y queso, que dijo que era hecho en casa con su familia. En retrospectiva, nos hubiera gustado haber hecho más de ellos. ¡Poco sabíamos cuán bueno era el pan en Perú!
La habitación era muy amplia y tenía 2 camas dobles, que eran un poco pequeñas, pero no nos importó y terminamos compartiendo la misma cama ya que hacía mucho frío por la noche. El baño fue probablemente el mejor que vimos en todo nuestro viaje a Sudamérica con un gran espejo, mucho espacio, agua caliente e incluso un pequeño espejo de maquillaje.
Sólo un pequeño problema fue que no había calefacción y las ventanas estaban acristaladas. Pero luego descubrimos que ninguno de nuestros hoteles tenía calefacción o doble acristalamiento, por lo que era la norma en la zona.
En general, fue un excelente comienzo para nuestra aventura sudamericana.
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