Fuimos 4 dias en Junio 2017 y nos quedamos gratamente sorprendidos con la calidad del servicio, aparte, el dueño vive al costado, cualquier inconveniente, esta atento a resolverlo, dar consejos. el personal super amable y unos excelentes cocineros. la recomiendo 100%. La ubicación de la casa es privilegiada, muy cerca esta la playa sin rocas, donde pudimos bañarnos sin problemas.
Fuimos un grupo de 23 personas, trece adultos y 10 niños. Lo pasamos increíble, la casa es súper cómoda, cada habitación con su baño pero la atención fue lo mejor de mejor, nos trataron demasiado bien y comimos delicioso cada día. Daniel y Yosimar siempre con una sonrisota felices de atendernos. Volveremos de todas maneras!!!!!
Un lugar muy privilegiado al frente de Las Pocitas. La playa es hermosa. La gente del hotel, aparte de realizar un excelente servicio, son muy amables y de muy buen trato. La comida fue espectacular con un cebiche mixto de protagonista. Los cuartos y espacios del hotel son perfectos, rústicos y relajantes. Se siente un muy buen ambiente en general. Agradecido.
La casa es amplia, con buena distribución y ubicación privilegiada sobre la playa. Piscina panorámica de aguas templadas que permiten bañarse hasta tarde en las noches. La casa tiene 4 suites matrimoniales en el segundo piso y una doble (cama de plaza y media y una single), una triple y una matrimonial en el primero (todas con baño privado). La casa incluye servicio de mucama/limpieza, pero sin duda lo mejor para los sibaritas será el equipo que conforma la cocina: Daniel (chef de Piura) y Josimar (ayudante de cocina), quienes cocinan como los Dioses y decoran cada una de sus preparaciones igual o mejor a cualquier destacado restaurant de comida Peruana. Ellos, además, se encargan de todas las compras y necesidades de cada día, de modo tal que los visitantes no pierdan tiempo…
Un oasis paradisíaco en Máncora (en el sector Las Pocitas), bajo la dirección atenta de Ricardo. La casa, muy cómoda, con ricos espacios comunitarios y una atención genial (mil gracias, Josimar). Para qué decir las maravillas que salían de la cocina gracias al encantador chef Daniel. ¡Morimos con sus delicias! Además, se agradece la excelente conexión al wifi. Ahora, las oportunidades de mejora: a pesar de que fuimos en época de "poco calor", los ventiladores de las piezas se hacen poco. Debiera haber uno también encima de la mesa de comedor en la terraza, y una escalera en la parte más profunda de la piscina. Ahora, se trata solo detalles, ya que de verdad lo recomiendo al 100%
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