El lago de aguas termales más grande de Europa tiene la reputación de hacer maravillas en personas aquejadas de diferentes enfermedades. Las aguas curativas y el barro terapéutico del lago han provocado que haya un progresivo flujo de turistas en busca de salud. Aquellos que vayan pueden disfrutar de sus efectos beneficiosos en balnearios y hoteles, aunque si lo que quieres es una auténtica experiencia en Heviz, báñate en el mismo lago.

La ciudad de libros de cuentos de Bydgoszcz es una espectacular mezcla de arquitectura gótica y art nouveau, graneros del siglo XVIII, calles de adoquines y cafés al aire libre. Toma un crucero por el pintoresco río Brda, pasea por las encantadoras calles de la histórica parte antigua de la ciudad o haz un picnic y observa a las personas en la isla de Mill. El reflexivo arte público, una floreciente movida de jazz, un teatro de ópera y una extraordinaria sala de conciertos le dan una dimensión cultural a la belleza de Bydgoszcz.

La pequeña Portofino, una de las ciudades-resort más populares de la Riviera italiana, cuenta con más de 500 residentes permanentes. Pero todo eso cambia durante los días de verano, cuando brilla el sol y los yates anclan en el puerto para echar un vistazo. En sus callecitas encuentras boutiques, galerías de arte, cafeterías y restaurantes. El buceo, el senderismo y la playa son populares maneras de pasar el tiempo en la zona, que ofrece también algunos sitios de interés histórico, como la iglesia de San Martín (Divo Martino) y la fortaleza Castello Brown.

La próxima vez que vayas a Toronto o a las cataratas del Niágara, para en Hamilton, donde el tráfico de turistas no es tan desenfrenado. El Niagara Escarpment ofrece un panorama espectacular, con preciosos senderos y cascadas. Visita las granjas de alrededor, los campos frutales y los viñedos, o planea tu viaje para que coincida con las animadas ferias de otoño de Hamilton.