Esther es una cocinera muy creativa, pero hasta allí. Si acostumbras comer comida casera o mucha comida rápida, sus platos te parecerán geniales. Si acostumbras comer en restaurantes y tienes amplio bagaje culinario, no te parecerá nada del otro mundo. Lo que hay que tener...en cuenta es que este es un chiringuito familiar del que viven Esther y su hija. Todo lo hacen ellas, por eso la espera en las reservas, la espera entre un plato y otro, los fallos de infraestructura del local en términos de limpieza, formas de pago, etc. Es cierto que ha tenido muchas reseñas positivas y presencia en la prensa, pero Esther se mercadea bien y el resultado es la fama que tiene. Finalmente, si está esperando una experiencia culinaria alucinante, no se haga ilusiones.Más