Me fue en el almuerzo y pedí falafel con ensalada simples, el plato estaba rico y bien bonito por un precio de 22 soles. Sumando con el video de surf y un jugo natural me pareció una buena relación de precio x beneficio.

Buen lugar, perfecto para solteros o familias. La gente se reúne aquí, algunos usan la fogata para calentarse, siempre hay buena música, videos de surf, informacion sobre el surf y el pueblo.

Estuvimos una semana en mi campamento de surf en Perú, también tienen Restobar, que fue increíblemente delicioso. Tuvimos allí todos los días desayuno, almuerzo y cena. Todo era comida tremendamente deliciosa y saludable. Fernando el cocinero también fue muy amigable. A veces esperas un poco...por la comida, poco vale la pena. Por lo tanto, no se enfermará con respecto a la comida debido al hecho de que se preocupan absolutamente por la limpieza y todo lo demás, lo cual es importante para la gente europea. Entonces la cocina está absolutamente limpia. Pero la comida es definitivamente la mejor en la pequeña ciudad chicama. Así que solo tienes que llegar y tener tu mejor comida. El menú también tiene mucho para la gente vegetariana. Así que todo lo que puede encontrar aquí es pizza, pasta, menú peruano.Más

Excelente comida y gran tamaño de porción después de un largo día de surf. Incluso hay opciones vegetarianas, que no pude encontrar en ningún otro lugar de la ciudad. . ¡incluyendo pizza vegetariana! ! Personal de sonido y lugar genial para pasar el rato. ¡Altamente...recomendado!Más

Comida fantástica con deliciosas opciones vegetarianas! Gente amable y agradable lugar tranquilo. La mejor comida en Chicama y una de nuestras favoritas mientras viajamos por América Central y del Sur.

Digo que esto fue solo promedio porque, en general, la comida en este pueblo era promedio. Es como si nadie hubiera usado más de un par de gotas de salsa en cualquier cosa. Dicho esto, Santiago, el chef, es realmente bueno haciendo lo que puede...para acomodar su dieta. Estela brinda un excelente servicio y es realmente amigable, ¡un punto culminante de mi viaje!Más

¿Dónde empezar? Mi novia y yo reservamos nuestro viaje a Perú para enero unos meses antes. El llamamiento para ir y navegar por la izquierda más larga de Chicama fue una idea que se me implantó en la cabeza un año antes y me estaba...volviendo loco sobre cómo iba a poner en práctica este plan. A primera vista, encontré algunas opciones en línea y finalmente me encontré con 'My Surf Camp Perú - Chicama RestoBar'. No se pudo encontrar mucho en ese momento de acuerdo con las revisiones, ya que este negocio aún era bastante reciente. Poco se encontró en línea en TripAdvisor, Facebook o cualquier otra forma de Social Media. Incluso después de contactar a Victor (el propietario), que no era más que amable y preciso mediante correos electrónicos de ida y vuelta, me sentí un poco incómodo y me enfrenté al dilema de que íbamos a arriesgarnos a reservar esta estancia.  " Sin agallas no hay gloria " . . . . ¿derecho? Bueno, finalmente hicimos nuestras reservas en este hostal, con la esperanza de que nuestra experiencia de surf fuera tan épica como se había prometido. Así que reservamos nuestros vuelos, enviamos nuestro depósito y esperamos un poco incómodo, Primero, ¿qué nos prometieron?  3 comidas cuadradas al día. Transporte a las playas cercanas para surfear, alquiler de equipos, una habitación para quedarse por una semana completa (7 días) con un baño en funcionamiento. Por un precio razonable de 650 USD - cada uno,  (Debo admitir que el precio fue algo en lo que ambos nos miramos, y es lo que nos empujó en esta dirección) Entonces llegamos a Trujillo, apenas haciendo nuestros vuelos. Estresado por el viaje, llegamos al aeropuerto. Allí nuestra guía de surf y 'conductor de la lanzadera' - Luis vino a saludarnos - bajo la dirección de nuestros correos electrónicos de ida y vuelta con Victor. Luis estaba, para decirlo claramente, ¡la BOMBA! Nos llevó a todos los mejores lugares posibles para surfear. Incluso nos dio un pequeño recorrido por Trujillo cuando tocamos la base y nos llevó a ver las olas en la playa cercana, Huanchaco, que eran frescas y limpias. Pero aún no hemos tenido nuestro equipo, así que tendrían que esperar otro día. Nos llevó a una Ruina Inka cercana, llamada Chun Chun, que fue una forma agradable de comenzar nuestro viaje. Después de vagar por las ruinas durante casi una hora, llegó el momento de ir al hostal y comenzar nuestra fase de desembalaje. Allí nos recibió Fernado, que era una joya de ser humano. Amigable y probablemente la persona optimista más positiva que he conocido. Nos saludó con los brazos abiertos y abordó todas las preocupaciones posibles e hizo que nuestra estancia fuera muy cómoda. No se podía decir mucho sobre las habitaciones realmente. Es un hostal, y nuestra habitación era privada. Entonces no tuvimos quejas. El único problema con el que nos topamos fue que el corte de agua, que hacía el baño, no era inutilizable. Pero tenga esto en cuenta: Chicama Beach está ubicada en medio de un desierto, el agua es escasa. Y llovió una vez cuando estuvimos aquí, y la mayoría de las veces corren en los depósitos de lluvia. ¿Puedo culparlos por eso? ¡Absolutamente no! Lo que nos entusiasmó fue que, incluso después de esta explicación, entramos en nuestra habitación a un enfriador de agua enorme con agua potable para acomodar, ¿tenían que hacer eso? No lo creo. ¿Fue un gesto cálido y encantador? Por supuesto que fue! El equipo de surf proporcionado era a la par. Los trajes que nos ofrecieron encajan como un guante. Las tablas de surf en alquiler eran varias en varios tamaños. Desde tablas largas, tablas de espuma divertidas, tablas cortas, pistolas, peces, lo que sea, y cuando seleccionamos nuestras tablas para el día, el personal se aseguró de que estuvieran a un lado y reservadas explícitamente para nosotros. Tuvimos la primera elegir del arsenal de tablas. Mi favorito personal era un tablero amarillo flaco 9 '4. Hecho para algunos paseos largos épicos. De hecho, puedo recordar la primera ola larga de 1 Km + que atrapé, gritando de placer "¡EL BEBÉ DE OJOS IZQUIERDOS MÁS LARGO DE CHICAMA! '. . . . ¿qué puedo decir? Estaba emocionado? ¿He mencionado la comida? La comida fue increíble, nos alimentaron extremadamente bien. Cada plato era diferente, cada plato tenía sabor. ¡Variedad! El desayuno era bueno y ligero. Nada en la parte superior. Perfecto para una mañana previa al surf / post - surf. El almuerzo era salado: pescado fresco, pollo, especias, Dios mío. Tan bueno. Estoy prácticamente salivado pensando en eso. La cena fue una hermosa manera de envolverlo todo y, antes de darnos cuenta, estábamos tan agotados y estábamos en la cama, listos para despertar al amanecer (literalmente) para una aventura de surf con Luis, Surfeamos el más largo a la izquierda, surfeamos un pequeño pueblo de pescadores cerca de Pasamayo, surfeamos las playas de Huanchaco. Todos los días fue una aventura. Las puestas de sol eran preciosas. Y el personal hizo que el ambiente fuera tan relajado y agradable, que no teníamos ningún cuidado en el mundo. Grita al personal. Para el chef - Santiago que cocinó nuestras deliciosas comidas. No podemos estar agradecidos, Pedirle a Victor que lo haga posible y que haga los arreglos. Es una pena que no podamos conocerlo en persona, el hombre detrás de las escenas. Recomiendo esta ubicación. Y con suerte, habrá muchas reseñas similares para esta ubicación y me encantaría ver que este lugar prospere. Atentamente y con mucho amor; Jean - Yves y Kat.Más