Hay infinitas razones por las que amamos Madrid. Tiene una mezcla única de historia y modernidad: palacios y monumentos escondidos entre edificios de estilo barroco español y mudéjar. Está llena de museos, galerías de arte, boutiques y festivales de música. Y, por supuesto, está la comida: todavía seguimos pensando en las muchas comidas con estrellas Michelin que probamos, además de las tapas tradicionales, como las patatas bravas y las tortillas españolas.