Muy mal ,no volvere,són muy Caros y ponent poca cantidad, ademas sé saltan el confinamiento y sin màscara!esto està muy muy mal hecho.

Comida en familia. El local es bonito, en línea con el nombre de reciclaje, muy original. El menú no es muy extenso, ni la carta de vinos.. Todos son productos ecológicos. La calidad es buena.
Nuestra experiencia, al menos este día no ha sido muy buena. Tardaron mucho en servirnos. Poco personal para tantas mesas. Llegamos a las 14:00 horas, y salimos a las 16:10 horas. Comidos raciones de hummus y cuatro hamburguesas, y un canelón de verduras, dos postres, dos cafés, 95€.
Concecerles que la señora se disculpó por la tardanza.

El espacio es myu original, si te gusta el reciclado tiene detalles muy majos.
La comida bien , aunque opciones reducidas.
El servicio correcto.
Para la carta que tienen el precio no es economico, aunque tampoco caro.
Fuimos 2 parejas , compartimos 2 entrantes + 1 segundoplato + postre .
Como bebida 2 cerzas pues te ponen agua osmotizada gratuita y pagamos 20 € por persona.

Nos encantó!
Estaba muy muy rico: hamburguesa vegana exquisita, el wok de pollo tenía un sabor muy especial y nachos con guacamole. Estaba todo muy rico y fresco.

Al niño le pedimos fingers de pollo y quizá, fue lo único que puedo poner una pega, ya que estaba rico de sabor, fresco, crujiente, pero un poquito seco. Las patatas y la salsa muy buenas.

El local es impresionante y la decoración, poco que decir, una pasada.

Hay una casa de madera enorme para jugar los niños y el local es muy espacioso.

Precio correcto. En general, una muy grata sorpresa a la que volveremos seguro.

Un sitio que no defrauda, calidad precio buena y un trato genial. Y que decir de su decoración, un sitio con mucho encanto y tranquilo.