Hemos estado este verano y es un hotel estupendo. Nos gustó todo: la ubicación, las vistas, las instalaciones, la tranquilidad, las habitaciones, la atención, la piscina, el desayuno...
Mención especial a Cati, que es encantadora y nos ha ayudado en todo, gracias.
Esperamos poder volver pronto.Más
Booking.com
Booking.com
Booking.com
Un alojamiento excelente ubicado en el inicio de la Sierra de Tramintana que despliega estilo en su decoración, su ubicación y su trato con el huésped.
Su sencillez y tranquilidad te atrapan desde el primer momento, gracias también a sus fabulosas vistas campestres desde el salón de desayunos, las terrazas de las habitaciones o desde la fabulosa piscina.
Las habitaciones son espaciosas así como sus baños que se complementan con lencería, toallas y sábanas de excelente calidad.
El trato es cercano y tranquilo, y con un nivel de servicio excepcional. Todo el equipo es fabuloso: mantenedlo.
El desayuno es cuidado, variado y personal al nivel de hoteles de mayor categoría y precio.
Especial valoración a las cenas, con una ambientación cuidada y un menú siempre cambiante, con producto de calidad y de cercanía.
La ubicación es muy buena en si misma y también para moverte por el norte de la isla: montañas cercanas y costa y playa a 20 min.
Volveremos pronto.
Hotel maravilloso en todos los aspectos, la ubicación, la finca, la piscina, la vegetación , los viñedos, el desayuno, absolutamente todo y lo principal el maravilloso trato de todas las personas que trabajan en el. En definitiva, un hotelito precioso que merece la pena conocer.
Sobre lo que se puede ver en la web simplemente indicar que es tal como lo ves. Estuvimos en una habitación con terraza. Habitación espaciosa, muy bien climatizada y muy bien cuidada, como el resto de instalaciones interiores y exteriores, piscina etc.
Bonito entorno rural en la falda de la serra de Tramuntana, con huerto y frutales propios.
Fantásticos desayunos,
Acertamos al decidir quedarnos a cenar la mayor parte de las noches. Proponían un menú cerrado pero francamente nos encantó todas las veces.
Pero lo que me gustaría destacar especialmente es la actitud de todas las personas que trabajan en el día a día que notabas que querían hacerte la estancia agradable con diferentes detalles.
Estuvimos 9 noches con nuestra pequeña mascota que nos pasaron volando.
Nuestra hija y su marido coincidieron con nosotros 4 de esas noches y también quedaron encantados.
Pequeño hotel en el corazón de la Serra de Tramuntana, aunque de fácil acceso. Ambiente agradable y acogedor, en una terraza; al igual que el anfitrión, muy atento y amable. El menú de cuatro platos: entrante, dos platos y postre; todos ellos regados con un buen vino. La comida muy buena y buenas raciones.
Hemos disfrutado de la tranquilidad de la Serra de Tramuntana, maravilloso hotel rural a las afueras de Moscari. La habitación contaba con una gran terraza en la que disfrutar un soldado atardecer. Todo muy nuevo aunque respetando la tradición de la construcción. El personal muy atento y simpático. Vale la pena perderse en este lugar.
Muchísimas gracias por vuestros comentarios tan agradables. Estamos contentos que lo habéis pasado bien y esperemos volver a veros pronto, y para mas tiempo! Fins un altre ....
