Me encantó. Es como una pequeña casa de muñecas, que tiene de todo, en un pequeño espacio. Las fotografías son fieles a la realidad. La dueña es muy atenta y agradable. La ubicación, magnifica. El WiFi funciona bien, especialmente en habitaciones. Mis hijos estuvieron encantados.
El lugar en si ofrece rutas en bici, kayac r el Minó, zona de juegos para niños, un gran mercado el sábad,etc.
Me encantó el pequeño rincón con mesita y sillas junto al muro del castillo. Felicidades a la dueña