Habitaciones grandes y la nuestra tenía un gran ventanal, desde ahí podíamos apreciar el centro de la ciudad, el Edificio Legislativo y más antiguas construcciones. Por las noches, esa vista es excepcional. La habitación tenía una TV muy grande, aire acondicionado y todos los servicios. El restaurante del hotel también es excelente. Aunque el centro de la ciudad no está lejos, tienen transporte de cortesía todos el día, ida y vuelta.