Una de mis mejores experiencias en Perú. El cuesta Serena es hermoso, tiene una ubicación privilegiada a las afueras de la ciudad. Se pueden ver las cordilleras desde tu cuarto. Además, la comida es increible; mi familia y yo todavia nos acordamos de la mejor crema de zapallo que comimos en nuestras vidas; hemos ido a 3 restaurantes para ver si se parecia pero NO. Además, Mariana es una excelente host, nos dio ideas, mapas y opiniones acerca de lugares que podiamos visitar. Mi papa pensaba que no iba a poder hacer nada porque no tiene físico, pero Mariana le recomendó una caminata light que le encantó. Lo recomiento 100%