Ya hemos probado la cocina peruana en un par de ocasiones, de hecho mi pareja ya había estado en Tampu anteriormente. Lo mejor, el osobuco, un guiso impresionante. Las bombitas también nos encantaron, y os recomendamos que probéis las cervezas Cusqueña, ambas son muy especiales. El flan brulée es una auténtica locura, y más aún combinado con el helado de idiazábal. Una velada super cuidada y nos fuimos deseando volver lo antes posible. Nos gastamos unos 40€ por persona, súper merecidos, con un par de entrantes individuales, dos segundos, un postre y las bebidas.