Nos sorprendió gratamente el buen trato del personal, la limpieza y detalles prácticos del lugar, sin duda hicieron que sea nuestra opción de nuevo al regresar a Madrid. Nos encantó que nuestra habitación tenía balcón a la calle y nos permitió disfrutar de algunas actividades musicales en la calle peatonal, pero también al cerrar la puerta, no pasaba el ruido a la habitación, por lo cual podíamos descansar de manera placentera. Muy recomendable.