En ciudad de Valencia encontramos un hermoso y moderno zoológico, cuyo acceso por un puente metálico que sobrevuela el Parque de Cabecera del cauce del río Turia, ya nos adentra a un lugar especial y que bien
vale una pausada visita. Su nombre es BIOPARC Valencia y fue inaugurado en el año 2008, sustituyendo a lo que fuera el clásico Zoo de Viveros.
Este innovador parque zoológico ha conseguido que las barreras sean prácticamente invisibles y los animales campan a sus anchas. Y este es la mayor peculiaridad de este parque: llevar al visitante
totalmente al hábitat de los animales y no al contrario, como ocurre cono los zoológicos tradicionales. Es el concepto llamado zoo-inmersión.
El Bioparc tiene como objetivo, fomentar el respeto por los animales y concienciar al ciudadano sobre el cuidado del medio ambiente, comprometiéndose con la educación y la conservación de los animales.
Especializado en la fauna africana, está dividido en cuatro zonas representando cuatro ecosistemas: sabana seca, sabana húmeda, bosques del África ecuatorial y Madagascar. Leopardos, lémures, leones, hienas, mangostas, jirafas, impalas, cebras, gorilas, monos, rinocerontes, hipopótamos, puercoespines, avestruces, antílopes, marabús, elefantes, nutrias, cocodrilos grullas… conviven entre sí en este mundo zoológico, que ofrece experiencias emocionantes en cada recodo del parque.
En el Bioparc podemos encontrar un pedazo de África en Valencia. Un pedazo de África donde los animales conviven en el bioparc como lo harían en la naturaleza, en grupos de la misma especie cohabitando en el mismo hábitat. Entre ellos se hallan separados por barreras naturales, piedras, ríos, puentes, cascadas,… Y tiene proyectado en los próximos años al Sudeste Asiático y América del Sur.
Bioparc bien merece ser visitado y disfrutado. Mejor con niños, pero sin ellos disfrutarás como ellos.