El ambiente está muy chulo y el personal es amable y simpático. Sorprende que se dedique tanto espacio del restaurante simplemente como decorado, con unos pasillos imitando calles de bali. Es una experiencia chula y se nota el gran trabajo detrás. Si a eso le añades que la comida está toda buenísima, que el personal es super amable, que el sitio es bonito y que los precios están muy bien... No me extraña que esté siempre lleno. Ya podrían aprender muchos restaurantes. Para 2, pedimos 4-5 platos + postre y nos quedamos muy bien. Con bebidas, la cuenta unos 38€. También buenas medidas Covid. Los salones son amplios y las mesas están muy separadas. Mucho más del mínimo de 2 metros diría yo. Las mesas las desinfectaban, lo que no ví y no estoy seguro al 100% (y no hacen en casi ningún sitio) es si desinfectaban también los reposabrazos de las sillas, que también lo tocas cuando te sientas y te levantas de la silla y sería lo suyo que en todos los sitios lo limpiaran. Yo después me lavo con gel y ya está. Me apetece repetir en este Volteresa Bali y también probar los otros Voltereta.