Nos sorprendió la rapidez con que nos atendieron. Era un viernes noche. Eramos once que nos presentamos sin reserva y en cinco minutos ya teníamos la bebida en la mesa. El local me gustó por su diseño. Cocina y equipo de cocina a la vista Temperatura perfecta y bastante cómodo. Algo oscuro para mi gusto eso sí. La carta muy sencilla de leer con varias opciones, adaptables a cada presupuesto ( a partir de 22-25 €) y una buena carta de bebidas, vino incluido. A mi me costó 40 € un buen plato combinado, una cerveza y un buen postre. Yo encontré el plato muy bueno y abundante. Era una mezcla de bacalao con carne de cerdo con patatas. Ambiente ruidoso, pues había varias mesas de grupos celebrando cumpleaños. Es un lugar como de "batalla" pero con clase. Olvídense parejas que quieren cenar con tranquilidad.Además, para colmo, estaba situado justo al lado de nuestro hotel (Marina Icelandair). Además pudimos pagar cada uno su cena sin problema, a pesar de ir en grupo.En definitiva ideal para grupos y para personas que quieran salir a cenar de restaurante al mejor precio posible.