Se trata de un hotel muy tranquilo y agradable, a tres minutos de la parada del metro. En 30 minutos en metro llegamos a las zonas de interés por lo que está bien comunicado. El personal muy amable y el hotel limpio y acogedor, pese a no ser muy grande. Las 4 estrellas no son equiparables a las de los hoteles españoles, pero está muy bien. Tuvimos un par de problemas en la habitación pero nos los solucionaron enseguida. Repetiriamos sin duda.