Buen sitio para descanso familiar, comodidades, buen servicio, noches amenizadas, mañanas para compartir en familia, servicio de desayuno, almuerzo y cena tipo bufet, dos proteínas mínimo, arroz acompañamiento y bebidas

n mi familia decidimos pasar año nuevo en Guacaru. La reserva no fue económica, pagamos un aproximado de 314 mil por noche por persona. Nos quedamos 2 noches 3 días. Llegamos el 31 y nos entregaron el cuarto pasadas las 3 pm.
El cuarto tenía una fuga de agua en el aire acondicionado, la limpieza muy regular y la presión del agua muy baja. Nos quedamos en los cuartos más “nuevos” que tenían disponible. Contaba con dos camas dobles y un tv pequeño. No cuenta con closet, si no con una pequeña cajonera y la puerta del balcón suuper dura de abrir.
En cuanto a la hostería tiene una piscina de buen tamaño, jacuzzi, buenas zonas verdes, juegos infantiles y canchas. La limpieza de la piscina y del jacuzzi muy regular, se siente el olor súper fuerte de clorox y se nota que último mantenimiento fue hace días. Las sillas de bronceo rajadas, lo cual es hasta peligroso, fui testigo de cómo una chica casi se corta porque se partió la silla mientras estaba intentando sentarse. Casi todas están rajadas.
El servicio es bueno, tienen personas muy amables y otras no tanto. Leidy, una de las meseras resulto ser bastante altanera y se nota que no tiene ni idea lo que es servicio y hospitalidad.
La comida es uno de sus fuertes, casi todos los platos fueron de mi agrado, tienen buena opción de bebidas y frutas.
Si deseas comer algo adicional, las comidas no son buenas, me comí un chorizo artesanal ( no incluido) y estaba seco, el jugo de mora que me dieron también era solo agua. Pero la comida ( incluida) es buena.
El precio del licor es el doble del precio regular, cobran hasta la ensalada de frutas para acompañar los tragos. Hasta el cóctel que supuestamente me “regalaron” fue cobrado al final. No vale la pena, demasiado caro.
El día 1 de enero mi mejor amigo llego y le cobraron 256 mil pesos por quedarse en el MISMO cuarto donde estábamos mi hija, mi madre y mi hermano. Me pareció exagerado por entrar en un cuarto ya pagado pero aún así accedimos porque queríamos quedarnos juntos.
Al final del último día, estábamos supuestos a entregar el cuarto a las 3 pm, nos tardamos 1 hora y media más ya que por la presión del agua las duchas tomaron más de lo normal. Al hacer el check out nos cargaron 90 mil pesos más por esa hora y media. La señora Leidy con una muy mala actitud me reclama que debimos entregar el cuarto antes y aún después de la explicación nos hacen el cobro. Por el precio que pagamos y el consumo adicional que hicimos, esperábamos un poco de flexibilidad. Además que por la cercanía con Medellín y el buen clima de san Jerónimo, pensaba volver. Pero por ahora buscaré opciones, estoy segura que hay mejores.

Fui con mi novio durante el fin de semana. Todo nos encantó! El servicio, las instalaciones, todo perfecto! Volvería, súper recomendado! Fue un fin de semana de descanso total!
Además está super bien ubicado!