A pesar que el clima no ayudó. El hotel es. Ideal para alejarse de la ciudad y lugares concurridos. Muy buena comida en restaurante y la atención es ideal. Una de las cosas q más me gusto. Fue su jacuzzi
- Wi-Fi gratis
- Estacionamiento gratis
A pesar que el clima no ayudó. El hotel es. Ideal para alejarse de la ciudad y lugares concurridos. Muy buena comida en restaurante y la atención es ideal. Una de las cosas q más me gusto. Fue su jacuzzi
El hotel es lindo, limipio, con una buena arquitectura que te permite disfrutar del bello jardin y del mar. Yo no surfeo y el hotel es perfecto para disfrutar de la sauna, jacuzzi y piscina caliente. Aproveché mi tiempo y me hice masajes a un precio justo. Pedí una ensalda de quinua deliciosa. Leí mucho en el balcón. Por el tema del COVID, llevan el desayuno a la habitación y es enorme. No escatiman en atender al cliente en ningún punto. El hotel es buenísimo y voy a regresar mil veces. Gracias!
Chicama es sin duda un lugar especial y el hotel hace que la experiencia sea única. Las facilidades, restaurante, bar, habitaciones amplias, vista a las olas, piscina y jacuzzi, gimnasio, entre otros, junto con una atención de primera con altos protocolos de salud son una combinación extraordinaria que se suman a una ola mágica y eterna, que además cuenta con el apoyo de lanchas para regresar al point y así poder sacar el máximo provecho a las sesiones de surfing. No hay duda que Chicama Boutique Hotel es la mejor opción.
Ante los efectos de la pandemia, y sabiendo de la reapertura, programamos este viaje.
La llegada fue por la tarde y nos dieron un tour con reglas y protocolos.
De ahí todo fue increible: la atención de Ivon en el comedor, Santos en el cuarto de tablas, la comida de Silvia, la hospitalidad de Cristina y Miguel Vegas (los gerentes).
Los tragos de Pisco y maracuya, el pescado a lo macho, la plancha o ceviches hicieron la estadia inolvidable. Atrás quedaron la tensión y complicaciones del momento...
Y si de surfear se trata sun con olas pequeñas el surfing fue genial.
Trabajo a distancia fue pisible gracias al internet.
Retorno renovados con unos box lunches dignos de un gourmet.
Tenemos que regresar y lo haremos...
Chicama bouitique es mágico....
Nos alojamos con familia y amigos.
El hotel es acogedor y busca q t desconectes.
Cuenta con una piscina chica temperada, la cual usamos pues fuimos durante temporada de bastante viento.
Cuenta con sauna, jacuzzi, gimnasio, mesa de billar, pin pon gratis.
Además d servicio de masajes y clases de surf.
Se puede aprovechar el pasear x el malecón, el cual está renovado.
Es un hotel boutique con todas las comodidades excepto TV en los cuartos pero tiene de todo: piscina temperada, spa, salón de juegos para los niños, bar, la comida es muy buena, desayuno buffet, las personas que atienden son súper serviciales y amables. La playa está frente del Hotel lo que da una vista espectacular si pides habitación en el segundo piso. Dan clases de surf y el malecón para salir a caminar esta súper bien cuidado y lindo