Hicimos una reserva con el gerente de hotel, nos dijo el precio y nos enseño las habitaciones que nos iban a dar y cuando volvimos de pokhara no teníamos las habitaciones elegidas y pretendían darnos otras peores y a un precio superior al convenido y encima se reían literal mente de nosotros, he viajado a Nepal cuatro veces , es la primera vez que me encuentro en esta situación, todos sabemos que la limpieza en Katmandu no podemos compararla con los hoteles de Europa y hay que ser comprensibles a las condiciones higiénicas de la ciudad, pero lo que uno no puede admitir es el engaño y la burla. Estuvimos unos días cuando llegamos a Nepal y las habitaciones "buenas" están en el ala nueva, en nuestra estancia vimos ratas y cucarachas en las habitaciones con la consiguiente cacería por la noche y cuando se lo dices pasan de ti, por todo esto no recomiendo el potala guest house los precios son muy caros para las habitaciones que te ofrecen, por el mismo precio consigues habitaciones mucho mejores.