No lo recomiendo.
El primer día quise bañarme pero sólo salía agua helada. Avisé que no salía agua caliente y me comentaron que tenía que esperar 10 minutos con el agua corriendo. Sin embargo, a pesar de haber esperado los 10 minutos (incluso más) esto nunca sucedió y solo me lavé la cabeza porque no toleré el frío. Prometieron que habían arreglado la terma y que no volverá a suceder pero, lamentablemente, no cumplieron su promesa. Me bañé, nuevamente, con agua fría. Al momento de ingresar a mi baño, encontré sachets de shampoo y jabones usados en la ducha, no sé de cuándo habrán estado ahí. Supongo que no limpian a menudo sus duchas.
El desayuno es poco, ofrecen pan queso y jamón. Tienes que llegar temprano para que te atiendan mejor y puedas conseguir comida. Solo hay 1 persona para todo el salón de comida.

Lo que más me decepcionó del hotel es que querían cobrar un 7% de recargo por pagar con tarjeta visa, lo cual es ilegal. TAMBIEN quisieron cobrar un tipo de cambio altísimo para dólares (S/ 3.38 x dolar). No quisieron respetar el precio que nos ofrecieron a través de la web y trataron de salirse con la suya. No sé quién será la de recepción para ofrecer 3 precios distintos en menos de 5 minutos. Pero insistí hasta que me cobren lo que se ofreció desde un principió. Tengan cuidado. Mejor lleven efectivo. (Nunca comentaron que iba haber un recargo por pagar con tarjeta y el tipo de cambio que querían utilizar)

No recomiendo el hotel, hay mejores.
Lo único que rescato es que la vista de la habitación tenía primer plano el misti, y era alucinante.

Bien ubicado en la zona denominada El Vallecito, personal muy amable y atento, solamente que en el desayuno algunas veces se agotaron los panes y tuvieron que enviar a comprar, por lo demas, nos pareció una buena opción cerca al centro de la ciudad y con restaurantes cercanos.

La atención por parte del personal es cordial. Te solucionan los inconvenientes. La primera noche nos pusieron en una habitación con la única ventana de la habitación, frente al ascensor. La siguiente noche nos cambiaron a otra mejor. Sin embargo, el baño no tenía ni un pequeño tragaluz. Algunas habitaciones no cuentan con ventanas por haberlas tapado debido a la construcción del ascensor.
No brindan artículos de aseo (como dice en la descripción del hotel), salvo dos jaboncitos.

El desayuno es rico, con pancito de tres puntas, huevos, yogurt, jugo. La señorita que atiende el desayuno, es muy amable. Sólo que faltan mesas, pues sólo hay 4. Por lo que la gente debee esperar para tomar desayuno.
La relación servicio - precio es buena. Es un hotel sencillo como para pasar la noche.