Muy bonito todo. Desde la llegada hasta la salida. Se preocupan por el visitante. Los ambientes son ventilados y con una vista espectacular para apreciar la naturaleza. El desayuno bien energético. Recomendado.

El hotel Tierra Inka en el Valle Sagrado es, por mucho, el mejor lugar para quedarse. El personal es muy amable, atento y dispuesto a ayudar en todo. Esto junto a la zona en la que se encuentra hace que sea un lugar acogedor, tranquilo y cálido. En contraste a otros lugares que te harían sentir lejos de casa, se siente como un hogar.

Las pinturas del hotel, sus pasillos, los lugares para descansar, las avecitas alrededor, las montañas y el cielo despejado son preciosos. Es muy limpio, ordenado y con buena comida. Además, hay muchos lugares para visitar alrededor. Por todo esto y más, recomiendo este hotel para quedarse en caso quieras visitar el Valle Sagrado y tener la mejor experiencia y estancia.

El hotel me pareció increíble, tiene una vista hermosa, los cuartos son muy limpios y bonitos. La atención fue la mejor, las personas muy amables. Tiene unas áreas verdes que te hacen sentir como en casa y lo mejor es que está muy cerca a la plaza de Ollantaytambo!