En primer lugar, todo depende con lo que lo comparemos. Este Hotel no cumple ni de lejos con los estándares europeos en lo que a limpieza y calidad de la comida se refiere. La habitación estaba sucia con los cristales pañosos, El cuarto de baño tenía óxido en la parte inferior y las toallas estaban viejas y desgastadas. El agua caliente en el baño fallaba en la ducha y en el lavabo estaba directamente cortada y el grifo bloqueado, es decir, solo daba agua fría. Debajo de la cama había Pelusas y pañuelos usados y tirados. La calidad de los alimentos del desayuno, terrible. Mucho ruido que provenía tanto de la calle -y eso que era un 18º piso- como del mal aislamiento con el resto de plantas y habitaciones contiguas. El agua de la piscina, puro cloro aunque el recinto tenía unas vistas impresionantes. En definitiva, la relación calidad-precio para un hotel en Penang estaba bien, pero no es un hotel de 4 estrellas.