Entrando con expectativas no muy altas, resulto este lugar una sorpresa muy positiva. El lugar es muy lindo, y enorme, y todas las cabinas y cabanias son de primera calidad. Las vistas son espectaculares, las flores y animales impresionantes, y cuando hay sol, la piscina una delicia. El personal es muy atento y trabajan duro en complacer, sea del hotel o del restaurante. Hay unas pocas desventajas que no dejan dar 5 estrellas, su naturaleza en una colina hace llegar de un lugar a otro bastante dificil, en particular con un nino chiquito. En ese mismo sentido, hay pocos lugares planos donde pueden jugar bien chiquitos. Tambien uno tiene que tener en cuenta que se esta lejos del pueblo de coroico, que se puede bajar caminando en una media hora, y regresar caminando es solo para los con muchas ganas de hacer ejercicio. Y no que la via sea tan facil con cualquier auto tampoco. Finalmente, la agua caliente en las duchas varia mucho y pasamos entre esperando la agua caliente a quemandonos. Pero si uno tiene en mente que este no es un hotel 5 estrellas en un lugar urbano, es completamente comprensible y sigue siendo un lugar excepcional.

Nos encantó quedarnos en este eco lodge! las cabañas tienen una vista impresionante, puedes recorrer los caminos y encontrar distintos animalitos. Además tiene dos piscinas hermosas y un restaurant con comida muy rica.