Me pareció un hotel confortable; el personal de recepción muy amables y cordiales. La decoración de acuerdo al lugar. Las habitaciones muy cómodas y limpias. No pasarás frío ahí! Agua caliente todo el día. Tienen el servicio de wifi libre, pero por lo menos en nuestras habitaciones no llegaba muy bien la señal. Nos tocó un balcón con un hermoso paisaje hacia la cordillera y la ciudad. Aunque, nuestras habitaciones daban para una calle muy concurrida por ser muy comercial; en la noche es solitario, y por ello, podíamos descansar sin problemas. El único punto en contra es el desayuno muy básico que ofrecen; pero por el precio de la habitación, está bien.

Es un hotel de paso. Las instalaciones y el mobiliario se notan envejecidos pero la cama es cómoda. Tiene televisor (antiguo) en la habitación, agua caliente, Wi-fi gratuito, el trato es amable pero se nota poco profesional. Es un hotel barato solo para dormir.