Ubicación perfecta, con una hermosa vista a las 3 fronteras. Está cerca del centro, y a la vez escondido, así que no hay mucho tránsito que puedan molestar en la estadía.
El hotel en sí, muy cómodo y hermoso. Teníamos sólo desayuno incluido, pero de todas formas todas las comidas las consumimos en el lugar. Los menús son a la carta, y no los típicos platos comunes que uno come en cualquier restaurant u hotel.
La pileta, muy linda, con servicio de bar para pedir la bebida que uno desee estando en la zona de la piscina.
Todo el persona, excelente y muy atento. Sólo unos pequeños inconvenientes en el medio, pero nada grave.
Las comidas, como cualquier otro servicio, tenía que se pedido a través de internet. Esto principalmente por temas de higiene, pero muy a la vanguardia el método.
Lo negativo, en la habitación al usar el hidromasaje, al parecer no estuvo en uso y largaron suciedad, pero a partir del segundo baño estuvo todo limpio. Y con el tema del desayuno, paso que se pidió te y no trajeron ni agua ni el saquito. Y otro día se pidió un gluten free y trajeron un saludable (se le dijo y dijeron que era así).Más
- Wi-Fi gratis
- Estacionamiento gratis