El hotel cuenta con unas 70 habitaciones, restaurante en PB donde se sirve almuerzo y cena y un amplio hall de ingreso.
La ubicación del hotel es, sin dudas, un punto fundamental a la hora de elegirlo. En pleno centro y muy muy cerca de todo. Cuenta con un amplio espacio para estacionar en la entrada del hotel por lo que es sencillo el descenso con valijas y bolsos.
Tanto la reserva como el ingreso y salida del hotel fueron sencillos y ágiles.
La habitación resultó amplia, de muy generosas dimensiones y correctamente amueblada. Sencilla y cómoda sin ser lujosa. Muy buena calefacción.
El personal muy correcto y amable,con buena disposición para asistir al cliente.
La cochera está a la vuelta del hotel, lo que no es muy cómodo pero tampoco es demasiada distancia a recorrer para llegar al auto.
En cuanto a la comida que puede consumirse en el hotel, la carta es acotada pero todos las opciones están muy bien pensadas y elaboradas. Al mediodía hay un menú ejecutivo a muy buen precio.
La relación calidad-precio del hotel es buena.
Aconsejable para pasear o ir por trabajo a Rosario.