La atención telefónica fue sumamente cordial. Pedí un departamento en 2do piso ( sabía que no había ascensor) pero desconocía que desde la puerta hasta la “recepción “ había otra, más otros escalones para llegar al patio donde estaba el departamento. Sólo un tramo tiene pasamanos, lo demás no. El dueño nos ayudó con el equipaje cuando llegamos, no así cuando nos fuimos.
El hotel es muy especial, puesto con gusto, pero lo notamos abandonado. Bastante sucio, un blackout no bajaba y en las puertas solo había cortinado que traspasaba la luz del día. El lugar para ducharse no podía ser más chico, se salpicaba todo y salía no demasiada agua. Un frasco de shampu y de crema enjuague usado por quien sabe quien.
El desayuno genial en cuanto que no había horario, muy sencillo pero para nosotros era suficiente. Las dos ultimas mañanas no había más que un poco de pan tostado, ya no estaban ni las dos medialunas!
Bueno, en definitiva los lugares eran amplios pero no volvería!!!!!Más
- Wi-Fi gratis
- Estacionamiento gratis