Camping tranquilo con instalaciones Súper limpias. Hemos Estado dos Semanas muy cómodos, parcelas correctas, con sombra e intimidad. Lavabos y duchas grandes muy limpias. Zona de fregaderos muy cómodos. Playa pequeña pero a unos 15minutos paseando tienes Luarca y sus playas.
Es MUY BUEN CAMPING en el que destacan la tranquilidad, el silencio en las horas de descanso, la ubicación y el trato del personal. Aún estando a pleno rendimiento en temporada alta, la limpieza es constante.
Tiene distintos tipos de parcelas, tanto para tiendas grandes o pequeñas, como para caravanas, furgonetas y autocaravanas.
Tiene mucha sombra y el suelo es cómodo para las tiendas. Las parcelas, además, están bastante bien niveladas.
Tiene una pequeña tienda donde poder comprar lo imprescindible, donde también encuentras hortalizas frescas de huerta (a nosotros, los tomates nos han encantado) y de una pequeña biblioteca y ludoteca.
Tiene un mirador con vistas al acantilado que es una delicia y los atardeceres desde allí, muy bonitos.
Tiene una pequeña piscina, sauna y zona de juegos.
Tiene acceso a la playa de Tauran desde el propio camping y se puede ir andando hasta Luarca por un paseo muy agradable.
Nos ha gustado tanto que íbamos para una semana y nos hemos quedado casi 1 mes. Desde luego, si podemos, volveremos.
Es un camping excelente para disfrutar de la zona y del propio camping
Situado en un acantilado, disfrutaras de unas maravillosas vistas en un camping que tiene todos los servicios esenciales y otros extras como piscina y mini pista de basket. Una pena que la mayoria de las parcelas mejor situacas para disfrutar del mar no dispongan de toma electrica cercana. El trato de los trabajadores muy cercano.
Camping pequeño con buenas vistas. Pero si vais a ir con perro mejor buscar otro, porque o son invisibles o sin cuerdas vocales o os llamarán la atención de mala manera y con poca educación. Sólo hay que leer las respuestas que escriben a las opiniones, quedan retratados ellos mismos. Ni de coña repetiría en un camping con ese personal, nunca nos habíamos sentido tan mal tratados.
Es la segunda vez que vamos al Camping, la primera en parcela y esta segunda en bungalows, nosotros en el pequeño (muy bien aprovechado) y nuestros amigos en el grande. Cómodos y con las mejores vistas del Cantábrico. El ambiente fabuloso incluso este año tan raro. Un camping perfectamente integrado en el entorno donde se respira el cuidado por la naturaleza. Una maravilla el camping, el bar y los alrededores. Todos muy amables.
