Aparthotel con todo lo que una familia con niños puede necesitar; empezando por la profesionalidad y la simpatía de loa trabajadores hasta acabar por la alta calidad del sueño y comodidad, dando sentido a su nombre: 'comfort', a un precio más que competitivo.

Tercera visita y como de costumbre todo perfecto y fantástico.
Pequeño apartamento muy luminoso, sencillo pero límpio, claro dando una sensación de verdadero comfort.

Baño equipado con una amplia ducha y secador. Dispone de muchas toallas y jabón.

Cocina equipadisima con gran nevera, congelador, micro, placa vitroceramica, armarios, utensilios de cocina...

Armarios en la habitación y comedor, y gran cama de 1,50 con sofá cama también grande.

AA/C y muchas tomas para conectar teléfonos y otros aparatos.

WIFI gratis y de gran velocidad.

Las sábanas y las toallas se cámbian a los 4 dias.

Ubicación : a dos minutos de la calle Esglèsia y Jovara, en el extremo más oriental de Calella, a quinze minutos de la plaza mayor; supermercados y tiendas en general alrededor.

Por último dispone de parking, de pago (consultar précio).

Sigo opinando que es una gran opción a tener en cuenta, eso si, abstenerse aquellos que quieran hotel con desayuno continental.

El apartamento no está mal, realmente parece tener los 50 m2 que comentan. Eso sí la decoración es inexistente y la distribución nefasta. Se supone que es un apartamento para familia o grupo, lo lógico seria tener la TV en la "sala" pues NO la tienen en la habitación. Digo sala porque es un espacio abierto con sofás, pero no hay nada más. Los utensilios de la cocina se limitan a cuberteria de 6 comensales 1 sarten 1 cazo. No hay tostadora. Eso sí te dejan una cafetera Nespresso, pero OJO, si se te ocurre usar alguna cápsula te la cobran a 1,50.
Por otra parte no hay control nocturno, lo cual permite que hayan (supongo que niños) corriendo hasta la 1 de la madrugada.
Muy anecdótico ver a las 12 de la noche un grupo de mujeres y niños tomando apertivio y fumando en cachimba en el hall del apartamento.
En fin Mini-malista