Un hotel que realmente vale las estrellas que tiene, cosa rara en Manhattan. A pocos metros del East River y toda su bahía con vistas espectaculares, pleno downtown, al lado de Wall Street y a pocos minutos del ferry a Staten Island y zona del World Trade Center. Paradas de bus al lado y de metro a pocos minutos andando.
Al estar en esa zona no suele haber tanto ruido ni jaleo como el que puede haber en el midtown, pero ahí ya va en gustos de donde alojarse.
Ademas de su buena situación cuenta con una decoración moderna y un gran equipo tanto de limpieza como en recepción y en el pequeño bar restaurante que hay en la terraza. Visita más que recomendada.
Habitación grande con grandes ventanas a Water St, limpieza total todos los dias. Smart Tv, Wifi gratuito, nevera, plancha vertical... Un baño de buen tamaño con ducha, completamente limpio y en perfecto estado.
Si está dentro de tu precio no lo dudes.Más