Quiero escribir un comentario, para advertir a quien reserve que no todas las habitaciones tienen las mismas dimensiones. A igualdad de precio, hay habitaciones diminutas y otras razonables. Por supuesto me tocó una pequeña, que tenía a un costado de la cama matrimonial, un pie (30 cm) de separación con la pared. Además, en el afán de darle al hotel un look jovial y deportivo, en la habitación había aparatos de gimnasia y hasta una pelota de 20" (0,50m) de diámetro. Obvio que no había espacio para nada.
El baño era razonable y cómodo, con una buena ducha.
Comer en el hotel no fue lindo, por la poca variedad y el tipo de comida.
Resumiendo, al precio que pagué, no es una buena opción, aunque sé perfectamente que NY es absurdamente cara y en la isla, habría pagado el doble.
Quiero destacar que el personal es amable, aunque tienen directivas que no pueden transgredir. Pedimos cambio de habitación pues estaba enfermo, y no tuvieron la más mínima contemplación.