Decir que nuestra estancia fue excelente es quedarse corto. Fuimos un grupo de 18 amigos,9 padres y 9 niños. Desde que llegamos nos sentimos como en casa. El personal fue amabilísimo. Intentaron por todos los medios hacer nuestra estancia más agradable, y lo consiguieron. Siempre sonrientes, complacientes y atentos.
El hotel está muy bien situado,con una boca de metro muy cercana y varios supermercados y restaurante en la zona. Muy limpio y con habitaciones cómodas. El detalle de que tengan café y té siempre disponible cuando llegas es un plus que agradecíamos todos los días al llegar agotados por la noche. Nos encantó. Volveremos seguro.