Una estancia maravillosa en todos los sentidos.
El apartamento es estupendo, amplio, cómodo y muy bien equipado. La situación fantástica. La limpieza diaria fabulosa.
Nos sorprendió muy gratamente que cada día nos dejaran pan reciente para desayunar en una panera en la puerta (muy bonita, por cierto), leche, mantequilla, mermelada, café, azúcar, magdalenas y Cola Cao. Un detalle formidable.
Pero por encima de todo destacar la amabilidad del personal y el cariño con el que nos han tratado en todo momento, en especial Begoña. Es una chica encantadora, dispuesta a ayudarte en todo momento siempre con una sonrisa, aconsejándonos y mimándonos. A nosotros nos robó el corazón desde el primer momento. Millones de gracias Begoña por hacernos sentir como en casa.