Acudí sin demasiadas expectativas y me llevé una grata sorpresa.
Cuenta con zona de aparcamiento enfrente al hotel gratuita.
En cuanto entras te das cuenta del encanto del alojamiento: decoración cuidada, c... con numerosos elementos rústicos en piedra o madera.
Hay varios salones para estar en un ambiente muy acogedor y natural.
En la parte exterior también hay zonas de estar, terraza y piscina con hamacas.
Transmite mucha tranquilidad.
La atención del personal es estupenda. La comida riquísima tanto la del desayuno buffet como la carta. Además hay la opción de menú.
En cuanto a la habitación, era amplia y estaba limpia.

El aire acondicionado no funcionaba bien y pasamos calor, la habitación estaba bien abuhardillada!
La comida bastante bien
El personal correcto 👌 calidad precio normal, en las fotos de la web nos pareció mucho mejor, por dentro reformado en algunas partes i por fuera en la piscina no renovado.

Cena en pareja en un lugar idílico. Un entorno muy acogedor, para pasar una velada tranquila, o incluso para un buen almuerzo y sobremesa. La comida exquisita. Recomiendo los chipirones encebollados, las almejas y el salmón en salsa de almejas. Aunque hay muchos otros platos de 10.
Especial atención al gerente y a Lucía, la asistente de mesa que nos atendió. Atenta, amable, cordial y siempre dispuesta a mejorar la experiencia. Uno de los platos que nos trajeron, contenía pulpo, al que mi pareja es alérgica. En cuestión de segundos, le trajeron zamburiñas a cambio
Resumiendo, sitio de obligado paso si se va por Brión, tanto para comer, como para alojarse y relajarse.