Lo bueno: El hotel se encuentra ubicado en una parte del la playa muy buena, no hay muchas olas, no hay piedra, ni muchas conchitas en esa zona del mar. Las instalaciones son aceptables y los cuarto que tienen vista al mar son agradables. Cuentan con frigobar y una terracita para disfrutar del paisaje.
Lo malo: El servicio deja mucho que decir, desde que llegas te topas con malas caras. Llegas y te hacer firmar las políticas del hotel y en tu cara la recepcionista tacha la hora de check out que indica 13hrs y coloca a mano 11am. Nadie nos ayudo a subir las maletas a la habitación, tuvimos que hacerlo nosotros mismos.
Al llegar no dieron el control del tv y en la terraza faltaba una mesita, recién por la noche nos percatamos de eso ya que apenas llegamos fuimos a la playa! Ya que la habitación no cuenta con teléfono para comunicarnos con la recepción tuvimos que llamar desde el celular y el personal de recepción nos indicó que deberíamos bajar a buscar las cosas! No estuvimos de acuerdo y tuvimos que insistir para que puedan aceptar traerlo a la habitación. De igual manera pedimos un trapeador o algo para secar el piso del baño ya que al bañarnos se mojó todo el piso ya que la cortina corta de la ducha es muy corta y no hay manera de evitar que no salpique el agua. Cuando llegaron con las cosas que pedimos nos dejaron el trapeador para que nosotros limpiemos el baño.
El desayuno deja mucho que desear un huevo por persona, pan, mantequilla, mermelada y café. No contaban con servilletas, tenía papel higiénico y tuvo que darnos eso en remplazo.
En conclusión, hay demasiados hoteles en esta zona y por el servicio y malos ratos creo que les recomendaría indagar más o pagar un poquito más para pasar un buen momento ya que vamos de vacaciones a pasarla bien, no a pasar malos ratos por un mal servicio.