Un hotel que no tiene restaurante y te obliga salir en la noche a buscar donde comer, la ventaja es que a 2 cuadras esta el Open Plaza.
Apenas llegas al hotel, aparte del saludo te dicen friamente que el check in es 1pm, sin siquiera hacer el esfuerzo de conseguir una habitación a los que llegan muy temprano... quizá sea su política pero hay otros hoteles en la misma ciudad donde la amabilidad es más notable.
Desayuno super básico, sin una zona de ocio interior y la ubicación no es atractiva, es oscura.
Lastima, espero puedan mejorar.